martes, 30 de octubre de 2012

 
QUE ES LA ENFERMEDAD DE LAS ENCIAS?
La enfermedad de las encías es una inflamación de las mismas que puede avanzar hasta afectar el hueso que rodea y sostiene a los dientes. Es causada por las bacterias, al formarse constantemente sobre los dientes una película transparente y pegajosa. Si no la elimina diariamente con el cepillado y el uso del hilo dental, la placa se acumula y las bacterias pueden infectar no sólo la encía superficial y los dientes, sino también el tejido gingival y el hueso que sostiene los dientes. Esta puede ser una causa de que los dientes se aflojen, se caigan o que finalmente el dentista los tenga que extraer.
Hay tres etapas de la enfermedad de las encías:

Gingivitis:
Esta primera etapa de la enfermedad es una inflamación de las encías provocada por la acumulación de placa en el borde de la misma, la cual, al no ser eliminada por el cepillado y el uso diario del hilo dental, produce toxinas que irritan el tejido gingival, causando gingivitis. Puede observarse sangrado durante el cepillado, al usar el hilo dental o incluso de manera espontánea. En esta primera etapa de la enfermedad, el daño puede revertirse (se puede curar)
    
 
Gingivitis: Las encías están levemente inflamadas, aparecen enrojecidas y sangran fácilmente.
  
Cómo sé si tengo gingivitis?
Los signos y síntomas clásicos de la gingivitis son las encías rojas, hinchadas y sensibles que pueden sangrar cuando se cepillan. Otro signo de enfermedad en las encías es que las mismas han retrocedido o retirado de los dientes, confiriéndole a sus dientes una apariencia alargada. La enfermedad de las encías puede provocar la formación de bolsas entre dientes y encías donde se acumula placa bacteriana y restos de alimentos. Algunas personas pueden experimentar mal aliento o mal gusto recurrentes aún cuando la enfermedad no esté avanzada.
   
Periodontitis:
En la periodontitis vamos a encontrar reabsorción ósea, reabsorción gingival, pérdida del Ligamento Periodontal y movilidad dentaria causado por presencia de placa dura (sarro) en la superficie dental, quiere decir que mientras mayor sea el tiempo de la placa dura (sarro) en la superficie del diente, mayor será la reabsorción, estos daños son irreversibles. Se forma una bolsa debajo del borde de las encías, donde quedan atrapados los alimentos y la placa creando dos tipos reabsorción ósea: vertical y horizontal de estas dos la reabsorción vertical es la más agresiva.
Periodontitis: las encías comienzan a separarse y a retraerse. Esto permite que la placa se desplace hacia la raíz, hacia las fibras y el hueso.
Movilidad dentaria:
La movilidad dentaria podemos clasificarla en tres grados esta movilidad va a estar dada por perdida del ligamento Periodontal

Grado 1: movilidad horizontal ( una ligera movilidad de la pieza dental)

Grado2: movilidad vertical ( este tipo de movilidad es la más agresiva)

Grado 3: movilidad horizontal y movilidad vertical

Con un adecuado tratamiento podemos controlar un grado 1 y grado 2 de movilidad este tratamiento va hacer dado por el especialista que se da a través de un tratamiento profiláctico que consiste en la eliminación de todo el cálculo dentario (sarro) que se encuentra adherido en la superficie dental donde también se va a encontrar reabsorción ósea que va a causar al paciente sensibilidad al frió y al calor llevando a cabo este tratamiento podemos prevenir el grado 3 de movilidad dentaria que consiste en la perdida del diente por Periodontitis avanzada:
En esta etapa final de la enfermedad, se destruyen las fibras y el hueso que sostiene los dientes, lo que hace que los dientes se desplacen o se aflojen. La mordida puede verse afectada y, si no se realiza un tratamiento adecuado, puede suceder que el dentista tenga que extraer los dientes.
Cómo sé si tengo la enfermedad de las encías?
La misma puede ocurrir a cualquier edad, pero es más común en los adultos. Si se la detecta en sus primeras etapas, puede revertirse o frenar su desarrollo. Consulte al odontólogo si observa alguno de los siguientes síntomas:
*Las encías están enrojecidas, inflamadas o sensibles
*Hay sangrado de encías al cepillarse o al utilizar el hilo dental
*Los dientes parecen ser más largos porque las encías se han retraído
y se ven las raíces
*Se sienten cambios en el modo en que cierran los dientes al morder
*Puede haber salida de pus entre los dientes y las encías
*Se percibe constantemente, la presencia de mal aliento o mal sabor en la boca.

Cómo se trata la enfermedad de las encías?
Las primeras etapas de la enfermedad, por lo general, pueden revertirse con el cepillado correcto y el uso apropiado del hilo dental. Una buena salud bucal ayudará a evitar la formación de placa.
Una limpieza profesional llevada a cabo por el dentista o el higienista es el único modo de eliminar la acumulación de placa que se ha endurecido y convertido en sarro. Su dentista o higienista limpiará sus dientes para eliminar el sarro por encima y por debajo del borde de la encía. Si su afección es más grave, quizá lleve a cabo un procedimiento de alisado de las raíces. El alisado radicular ayuda a eliminar las irregularidades de las raíces dentales, dificultando el depósito de la placa.

Mediante la programación de revisiones periódicas, la enfermedad de las encías en sus primeras etapas puede tratarse, antes de que se transforme en un trastorno más serio. Si la enfermedad está en un estado más avanzado, necesitará de un tratamiento a realizar en el consultorio.

Cómo puedo prevenir la gingivitis
y cualquier otra enfermedad a las encías? La correcta higiene bucal es fundamental. Las limpiezas profesionales también son extremadamente importantes pues una vez que la placa se endurece y acumula, o se transforma en sarro, sólo un dentista o higienista podrá eliminarla.

Usted puede ayudar a detener la gingivitis antes de que se desarrolle de la siguiente manera:
* Cepillado correcto y uso apropiado del hilo dental para eliminar la placa, los restos de alimentos y controlar la acumulación de sarro
* Alimentación correcta para asegurar la adecuada salud de su mandíbula y dientes
* Evitar el tabaco
 
 Encías saludables: son firmes y no sangran, se adaptan perfectamente al borde de los dientes.

viernes, 24 de febrero de 2012

PROMOCION

Durante el mes de Marzo
50% de Descuento en
Incrustaciones de Polividrio
Diagnóstico y Plan de Tratamiento
SIN COSTO
Previa cita a los teléfonos:
Consultorio: 9 394452
Celular: 229 1 344275

Incrustaciones Estéticas en Polividrio

Las Incrustaciones de Polividrio, son restauraciones estéticas indirectas que se realizan en el Laboratorio, por lo que se requiere tomar una impresión de la pieza que se va a restaurar. Están indicadas para dientes posteriores (premolares y molares). Se utilizan cuando aún hay suficiente tejido dental remanente, es decir; que la periferia del diente no ha sufrido daño considerable.
El material en que realizamos este tipo de restauraciones es un Polividrio de ABC Dental, un Cerómero libre de metal. Este material tiene un alto contenido de relleno inorgánico de micropartículas de cerámica y un relleno intersticial de matriz orgánica de polímeros. Se trata de un polímero optimizado que incorpora en su composición finísimas partículas de cerámica y fibras reforzadas. Tiene un aspecto vital, elevada resistencia a la torsión y un índice de abrasión muy similar al esmalte dental; reúne las ventajas de la cerámica y el Composite.
Se caracterizan por su alta estética, son libres de metal, resistentes a las fracturas y menos abrasivos que la porcelana. Estas propiedades han logrado colocar a los cerómeros en un lugar muy importante, brindando una excelente alternativa de tratamiento donde están contraindicadas las porcelanas. Presenta una dureza ligeramente superior a los dientes naturales, es aproximadamente 2 veces más resistente que las restauraciones de metal-cerámicas, desgasta en menor medida a su antagonista natural, permite obtener el color exacto con grosores de capa entre 0.5 mm y 1.5 mm lo que permite realizar trabajos mínimamente invasivos y tiene una gran gama de colores para dar a las restauraciones una caracterización totalmente individual, en todas las tonalidades y en cualquier intensidad deseada.

En Fusión Oral podemos brindarles estos y muchos otros tratamientos.
Su sonrisa, es nuestro compromiso.

martes, 14 de febrero de 2012

Rechinar los dientes en la Infancia

Cuántos padres acuden a nuestra consulta preocupados porque su hijo o su hija durante el día o la noche presentan un cuadro de bruxismo o rechinar de dientes. Es un trastorno que se caracteriza por una hiperactividad anómala realizada por un conjunto de grupos musculares que generan movimiento pero que carecen en ese momento de utilidad al realizarlos, ocasionando apretamiento, frotamiento, rechinamiento o golpeteo entre si de los dientes. Cuando masticamos sí que realizamos una acción que es la de triturar los alimentos, en cambio; el rechinar de dientes es una acción que se realiza de forma inconsciente la mayor parte de veces y no tiene ningún fin. El bruxismo puede ser céntrico cuando lo que se produce es un apretamiento de los dientes entre sí y suele darse durante el día la mayoría de las veces y excéntrico cuando se produce el denominado rechinar de dientes y que suele darse por la noche, en la fase de adormecimiento o primera parte del sueño.
Su frecuencia es elevada en la población pediátrica observándose un pico importante de su prevalencia entre los 6 y 10 años, época importante marcada por la caída de los dientes de leche y erupción de los permanentes lo que en muchos casos ocasiona alteraciones en la oclusión dental. Existen muchas teorías sobre las causas que ocasionan el problema, sin embargo sí que sabemos que existen unos factores predisponentes como irregularidades en la superficie de la lengua o labios o contactos anómalos entre dientes o pérdida prematura de alguno. Además existen otros factores que son desencadenantes como por ejemplo el estrés.
La clínica del bruxismo va a depender de la frecuencia, intensidad y edad del paciente pudiendo ocasionar desde sonidos oclusales audibles, sobre todo nocturnos y que son lo que alarma a los padres. Por otro lado y esto es labor del odontopediatra el descubrirlos, pueden aparecer erosiones cervicales al haber una sobrecarga al ocluir, destrucción del esmalte dental por desgaste, sobre todo en incisivos superiores e inferiores, movilidad dentaria aumentada y en los casos extremos nos podemos encontrar con sensibilidad aumentada e incluso dolorosa a estímulos como el calor o el frio y fractura de dientes por la presión tan brutal generada sobre ellos. Además de la clínica dentaria, nos podemos encontrar con síntomas que afecten a la articulación de la mandíbula en forma de chasquidos, roces o crujidos que nos indicará que existe una cronificación del proceso. Los problemas neuromusculares también pueden estar presentes en forma de dolor a nivel de los grupos musculares de la mandíbula tanto en reposo como en movimiento lo que a la larga ocasiona una sensación de fatiga por el trabajo constante al que son sometidos estos músculos. Por último, ya en los casos más crónicos y graves podemos encontrarnos con alteraciones en la morfología craneofacial en forma de prominencia del maxilar inferior.
Lo normal es que este problema se solucione de forma espontanea conforme el niño o la niña crecen, sin embargo, si ello no se produce, el tratamiento irá encaminado a intentar ajustar la oclusión, reparación con composites de las zonas de desgaste o dañadas y utilización de férulas de descarga para evitar los efectos colaterales que se producen.
Por último, me gustaría que desapareciera un falso mito en pediatría que no es otro que la relación entre la existencia de parásitos intestinales y la presencia de bruxismo o rechinar de dientes. No existe evidencia científica por lo que no deberemos de relacionarlos.
Si te gusta nuestro Blog, comparte... 

lunes, 13 de febrero de 2012

CARIES DENTAL

Causas, Incidencia y Factores de riesgo
Las caries dentales son uno de los trastornos más comunes, después del resfriado común. Suelen aparecer en los niños y en los adultos jóvenes, pero pueden afectar a cualquier persona y son la causa más importante de pérdida de los dientes en las personas más jóvenes.
Las bacterias suelen estar presentes en la boca y convierten todos los alimentos, especialmente los azúcares y almidones, en ácidos. Las bacterias, el ácido, los residuos de comida y la saliva se combinan en la boca para formar una sustancia pegajosa llamada placa dentobacteriana que se adhiere a los dientes y que es más prominente en los molares posteriores, justo encima de la línea de la encía en todos los dientes y en los bordes de las obturaciones. La placa que no es eliminada de los dientes se mineraliza y se convierte en sarro. La placa y el sarro irritan las encías, produciendo gingivitis misma que si no es atendida ocasiona periodontitis.
La placa comienza a acumularse en los dientes a los 20 minutos de la ingestión de alimentos, que es el tiempo en el que se presenta la mayor actividad bacteriana. Si la placa no se remueve por completo y en forma rutinaria, las caries no sólo comienzan sino que prosperan.
Los ácidos de la placa disuelven la superficie del esmalte del diente y crean orificios en el diente (caries). Las caries no suelen producir dolor hasta que se tornan muy grandes y afectan los nervios o causan una fractura del diente. Si se dejan sin tratamiento, se puede producir un absceso dental. La caries dental que no se trata también destruye las estructuras internas del diente (pulpa) y finalmente causa la pérdida de éste.
Los carbohidratos (azúcares y almidones) aumentan el riesgo de caries dentales. Los alimentos pegajosos son más dañinos que los no pegajosos, ya que permanecen en la superficie de los dientes. Los refrigerios frecuentes aumentan el tiempo en que los ácidos están en contacto con la superficie del diente.
Síntomas
Puede no haber síntomas, pero si se presentan, pueden abarcar:
·         Dolor de muela o sensación dolorosa en los dientes, sobre todo después de consumir bebidas o alimentos dulces, fríos o calientes
·         Cavidades visibles en los dientes
Signos y exámenes
La mayoría de las caries son descubiertas en sus fases preliminares durante los controles de rutina. La superficie dental puede estar suave al hurgarla con un instrumento puntiagudo. El dolor puede no presentarse hasta las etapas avanzadas de la caries dental. Las radiografías dentales pueden mostrar algunas caries antes de que sean visibles clinicamente.
Tratamiento
El tratamiento puede ayudar a impedir que el daño a los dientes lleve a caries dentales.
El tratamiento puede involucrar:
·         Obturaciones
·         Coronas
·         Incrustaciones
·         Tratamiento de conductos
Los odontólogos obturan los dientes eliminando el material dental cariado con el uso de una fresa dental y reemplazándolo con un material como las aleaciones de plata, oro, porcelana o resina compuesta. Estos dos últimos materiales son los que más se asemejan a la apariencia natural del diente y pueden preferirse para los dientes frontales. Muchos odontólogos consideran que las amalgamas (aleaciones) de plata y de oro son más resistentes y suelen usarlas para los dientes posteriores, aunque hay una tendencia a utilizar la resina compuesta altamente resistente también en los dientes posteriores.
Las coronas o "fundas dentales" se usan cuando la caries es muy extensa y hay una estructura dental limitada, la cual puede ocasionar un diente debilitado. Las obturaciones grandes y la debilidad del diente aumentan el riesgo de ruptura del mismo. El área cariada o debilitada se elimina y se coloca una corona sobre la parte del diente que queda. Dichas coronas suelen estar hechas de oro, porcelana o porcelana con metal.
Un tratamiento de conductos se recomienda si el nervio del diente muere como consecuencia de una caries o de una lesión. Se extrae el centro del diente, incluidos el nervio y el tejido (pulpa) vascular (vasos sanguíneos), junto con la porción cariada del diente y las raíces se rellenan con un material sellante. El diente se rellena y se le puede colocar una corona por encima en caso de ser necesario.
Pronóstico
El tratamiento a menudo salva el diente. El tratamiento a tiempo es menos doloroso y menos costoso que el tratamiento de caries muy extensas.
Es posible que usted necesite un medicamento anestésico (lidocaína) u otros medicamentos recetados para aliviar el dolor durante o después de una obturación o tratamiento dental.
Complicaciones
·         Molestia o dolor
·         Diente fracturado
·         Incapacidad para morder con los dientes
·         Absceso dental
·         Sensibilidad dental
Prevención
La higiene oral es necesaria para prevenir las caries y consiste en la limpieza regular profesional (cada 6 meses), cepillarse por lo menos dos veces al día y usar el hilo dental al menos una vez al día. Se pueden tomar radiografías cada año para detectar posible desarrollo de caries en áreas de alto riesgo en la boca.
Los alimentos masticables y pegajosos, como frutas deshidratadas y caramelos, conviene comerlos como parte de una comida en lugar de refrigerio. De ser posible, cepíllese los dientes o enjuáguese la boca con agua luego de ingerir estos alimentos. Reduzca los refrigerios, los cuales generan un suministro continuo de ácidos en la boca. Evite el consumo de bebidas azucaradas o chupar caramelos y mentas de forma constante.
Con frecuencia, se recomienda el fluoruro para la protección contra las caries dentales, pues está demostrado que las personas que ingieren fluoruro en el agua que beben o que toman suplementos de fluoruro tienen menos caries. El fluoruro ingerido cuando los dientes se están desarrollando se incorpora dentro de la estructura del esmalte y lo protege contra la acción de los ácidos.
También se recomienda el fluoruro tópico para proteger la superficie de los dientes, lo cual puede incluir una pasta dental o un enjuague bucal. Muchos odontólogos incluyen la aplicación de soluciones tópicas de fluoruro (aplicadas a un área localizada de la dientes) como parte de las consultas de rutina.